Los
Simpson tienen nuevo tutor o encargado
Groening, creador de la serie, la deja en
manos de su productor y guionista principal, para dedicarse a Futurama,
una nueva tira en la que, cómo no, ridiculizará a la ciencia ficción.
A no desesperar. Homero seguirá bebiendo
cerveza delante del televisor de su ¿tranquila? casa de Springfield. Pero
el papá de Los Simpson, es cierto, acaba de dejarlos en busca de
otro futuro: uno que se encuentra como 1.000 años más allá. Matt
Groening, el creador de la serie que ya lleva nueve años seguidos en
pantalla, encara para el 99 un nuevo dibujo animado al que llamó Futurama
y cuyos personajes (una alienígena, un robot y un humano descongelado 10
siglos después) deberán sobrevivir en el incierto mundo del 2999.
¿Cómo afectará esto a Los Simpson,
a punto de comenzar -el 20 de setiembre- su décima temporada en los
Estados Unidos? En tren de tranquilizar tanto a los televidentes como a la
industria del espectáculo (y el merchandising), todos juran que Los
Simpson no van a cambiar. "No hay que arreglar lo que no está
roto", sintetiza Mike Scully, algo así como el tutor o encargado (a
partir de ahora) de este complejo grupo familiar. Su nombre garantiza la línea
de continuidad del programa, al que Scully entró hace seis años y donde
se afirmó en los últimos tres como productor ejecutivo y el principal de
sus guionistas. "Después de 200 episodios los personajes ya están
bien arraigados; el público sabe bien quién es y qué representa cada
uno y no vamos a cambiarles la personalidad", confirma Scully como
para que no queden dudas.
Un poco más complejo resulta entender por
qué Groening decide bajarse de semejante éxito. "No fue agotamiento
de Los Simpson ni nada por el estilo, simplemente quise hacer
ciencia ficción porque es algo que me debía desde la infancia -explicó
Mr. Simpson a Clarín en Los Angeles-. De chico leía esas aventuras y
pensaba que iba a ser bárbaro cuando yo creciera y los efectos especiales
mejoraran. Estaba seguro de que podría hacer todas esas cosas que se
describían en los libros. Pero resulta que crecí y encontré que un montón
de los conceptos de la ciencia ficción me irritaban. Así es que pensé
en este programa como la oportunidad de tomar esos convencionalismos y
satirizarlos. Quiero divertirme con ellos."
¿De qué convencionalismos
habla?
Me gustan La guerra de las
galaxias y Viaje a las estrellas y todas las variaciones sobre
el tema. Sin embargo, quería hacer un programa de televisión en el cual
los problemas del universo no son resueltos por el militarismo guiado por
la espiritualidad de la Nueva Era. Yo quería probar con algo distinto
porque tengo una visión un poco más.... mmmmm... subversiva.
¿Ese es el principal desafío?
Bueno, la mayoría de los
programas de ciencia ficción son sobre personas que viajan al espacio
exterior y buscan por dónde volver a entrar. Hay muchos campos de
estrellas y filman eso simplemente porque no pueden (o es muy caro) volver
a la Tierra y mostrar los escenarios. Me 99entusiasma la idea de que
nosotros vayamos a poder hacerlo: volver a la Tierra y hacer frente a
algunos de los problemas del futuro, que serán los mismos que tenemos
ahora.
Se trata, entonces, de volver
a cambiar las reglas del juego. Algo que ya le ha salido más que bien al
señor Groening. Antihéroes pintados de amarillo, Los Simpson cambiaron
de un golpe no sólo la historia de los dibujos animados sino el concepto
mismo de la típica familia americana. La clave: poner un espejo impiadoso
delante de su propia imagen. Ganadora de 12 premios Emmy, la serie de Fox
(que la programa en su señal de cable los domingos a las 20 y de lunes a
viernes a las 20.30) es emitida también por Telefé, los domingos a las
21, con un promedio de 16 puntos de rating. Sus altos niveles de audiencia
la convierten en todo un comodín para el canal que en los últimos dos años
no dudó en ubicarla en cuanto horario quiso mantener
"caliente", ya sea para reemplazar a Susana Giménez o para
remontar una telenovela fallida. Su creador no se muestra en absoluto
sorprendido ante la universalidad de un dibujo con tantas referencias
localistas. "Lo que sostiene a esta serie es su gracia. Muestra las
cosas en el nivel preciso del chiste. Lo que realmente me llama la atención
es que haya durado tanto." De modales correctísimos y paciencia
moderada, este hombre no puede con su ironía. Basta escuchar un rato a
Groening para saber por qué son como son Los Simpson.
¿Lograrán seguir Los
Simpson sin usted?
Claro! Lo que vi para la
temporada próxima es fantástico. Además, hay un "secreto".
Muchos programas que no te recompensan por prestarles atención. Pero en
Los Simpson, si uno está realmente atento, encuentra algo oculto en el
trasfondo. Eso me encanta. Adoro incluir bromas que los chicos no captan.
Después crecen, leen unos cuantos libros, van a la universidad, se
reencuentran con esos episodios y pueden verlos a un nivel completamente
distinto. Desde ese lugar, el futuro de Los Simpson puede ser inagotable.
Scully, que nació en una
pequeña ciudad de Massachusetts llamada West Springfield!, se parece
hasta físicamente a Groening. Los dos de impecable barba candado, los dos
de anteojos permanentes, los dos irónicos, Scully se permite, sin
embargo, el chiste más francamente directo. No parece presionado por la
responsabilidad que le cayó en esta nueva temporada y tan tranquilo
quiere demostrar que está, que hasta arranca la charla marcándose
errores. "Es muy difícil hacer siempre algo nuevo. Bart logró que
echaran al director de la escuela como tres veces ya. Eso sí, en
distintas circunstancias". El hombre se niega bajo la explícita
frase "eran una porquería" a nombrar sus anteriores
experiencias televisivas, pero asegura que para trabajar como productor no
hay nada mejor que los dibujos animados. "No hay estrellas que se
encierren en su camarín, ni berrinches ni pretensiones. Los protagonistas
de Los Simpson -bromea- tienen mucha confianza en sí mismos y el
compromiso de trabajo es incondicional." Así y todo, la nueva
temporada de la serie incluirá como atractivos adicionales una serie de
voces famosas en distintos episodios. Por ejemplo, las de Kim Basinger,
Alec Baldwin, Mark Hamil, el grupo musical Moody Blues y los conductores
televisivos Jerry Springer y Kathie Lee Gifford, entre otros. Por otra
parte, Scully promete incrementar los cruces con personajes de otras
series, como ya se hizo cuando los agentes Mulder y Scully de Los
Expedientes Secretos X investigaron un caso en Springfield.
¿Qué valores transmite
Los Simpson que no puedan cambiar?
El público termina dándose
cuenta de que realmente son gente que se ama, que siempre se protegen y
que permanecen juntos pase lo que pase.
¿Es cierto que Los Simpson
van al cine?
Eso espero, pero no por ahora.
Lo mejor sería esperar un par de años después de que la serie termine,
como para que el público esté ansioso por verlos otra vez.
¿Y cuándo cree que
termina?
Cuando se nos acaben las
ideas.
Periodista: Adriana Bruno
Diario: Clarín 23/08/98 |